¡Abajo el régimen! (La casa de los espíritus)- Ensayos y reseñas


¡ABAJO EL RÉGIMEN!
(La casa de los espíritus- Isabel Allende)


Muchos son los aspectos que destacan la peculiaridad de esta interesante saga familiar, que, aunque bien podría retratar superficialmente muchos de los constructos sociales tradicionalmente latinos, brinda la posibilidad al lector de adentrarse, no solamente en el sentir de cada uno de los personajes, sino en el quiebre coyuntural que desgarra a todo un pueblo; permitiéndole, además, obtener una vista panorámica de la ya conocida historia de los oprimidos y los opresores.

La escritora, en esta su primera novela, hace uso de su singular estilo, tan envolvente y sencillo, para guiarnos por el ciclo generacional de la familia Trueba Del Valle, enmarcada como protagonista y antagonista, simultáneamente, dentro de la línea de tiempo que de los terratenientes primitivos da paso a los atroces dictadores.

Dentro de toda la narrativa de esta escritora chilena, tanto en esta como sus demás novelas, se destaca especialmente el importante papel y despliegue maravilloso que reciben los personajes femeninos, como pilares indispensables para el desarrollo de cada historia. Mujeres pensantes que se niegan a encajar en los estrechos moldes que la sociedad les impone, mujeres brillantes que desafían a todo tipo de agresores y superan valerosamente todo tipo de inclemencias, voces sin las cuales no habría sido posible el triunfo de las revoluciones.

Es así como la posición marginada de la mujer, en un abismal contraste con la de su par, el hombre, se hace evidente en las relaciones interpersonales, políticas y sociales que fomentan la necesaria presencia de ideales feministas dentro de su obra. Porque, así como quien se enfrenta con estas lecturas no necesita ser oriundo de una nación en particular para condolerse profundamente con el sufrimiento que dejan tras de sí las dictaduras, no hace falta haber padecido a tal escala las muchas manifestaciones de la violencia machista, que caracteriza al sistema patriarcal, para asumir con determinación toda lucha que busque reivindicar a la mujer, definitivamente.

Y sí, aunque hoy por hoy haya muchos, e incluso muchas, que consideren irrelevantes o inexistentes las pequeñas y grandes problemáticas que dejan como resultado las violencias que política, social y culturalmente las mujeres seguimos resistiendo, los dramas que nos cuenta este libro siguen teniendo vigencia, y continúan revolviéndole las entrañas a quienes tienen el placer de leerlo.